No soy ninguna persona especialmente deportista, simplemente en Marzo del
año pasado empecé a cuidarme un poco y como suele ocurrir con el deporte, el
hecho de verte mejorar te va planteando nuevos retos personales que te ves en
la obligación de aceptar por el simple hecho de demostrarte que puedes. De eso
se trataba mi participación en un triatlón. Nunca quise ser un ganador,
solamente probar que podía terminar esa prueba.
Mi sorpresa empieza cuando decido empezar a prepararme y para ello me apunto
a un club, TRIRUNNERS. No sé qué me lleva hasta allí, pero soy de los que
piensa que las cosas no ocurren porque sí. Poco a poco empiezo a hablar y
conocer a la gente y a ver y disfrutar el ambientillo, parecen buena gente.
Unos pocos meses después de empezar, nos apuntamos al triatlón de Lekeitio y la
gente ya nos anima a los que vamos a participar y eso nos hace confiar aún más
en nosotros mismos y nos aplica una presión positiva extra que nos mueve a dar
el máximo.
El día de la carrera, no somos ni dos, ni tres, sino ocho o nueve los que participamos. La tensión se puede palpar, no es para menos, entre otros muchos triatletas,
los campeones del mundo están en la prueba, ¿qué otro deporte permite compartir
salida a un amateur con un campeón del mundo? Más motivación. Salen las chicas,
20 minutos y arrancamos. ¡Suena la bocina! Golpes, codazos, aguadillas,
empujones, coges aire, solos das brazadas y coges aire, tocas arena, a la bici,
rápido, no hay tiempo que perder. Pedales y bebida, hay que hidratarse, el
puerto ese día está un poco menos cuesta arriba, bajadas a tope, adrenalina,
suelo empedrado, dejas la bici, zapatillas, corre, más rápido, no pierdas
tiempo, corre cuesta arriba, coge a esos dos que están delante, pásalos, puedes
pasarlos, los pasas, gente, mucha gente, ánimos, aplausos y se termina.
¿De verdad ha pasado? Sí, sí que ha pasado y ¡ha sido genial! el próximo
más largo, hay que disfrutarlo más. Espera, ¿hay un próximo? Por supuesto.
Pronto.
Gracias a todos por los ánimos, la paciencia y la motivación. Sois un
equipazo.
IGOIN BETANZOS